Sigue calando en la actualidad la desigualdad social que existe, y la impunidad con que la justicia se maneja, la película es sobre los derechos de los Afroamericanos pero sin duda aplica a la mayoría de los países del mundo en donde el sistema somete al pobre y apoya al rico, con un buen ritmo se cuenta la historia de el abogado Bryan Stevenson (Jordan) quien busca ayudar a los criminales condenados a muerte que no tuvieron una buena asesoría de sus derechos y fueron condenados en su mayoría sin pruebas contundentes, el caso principal es el de Walter McMillian (Foxx).
Es una buena película quizá le falta profundidad en sus personajes, quienes no me lograron empatizar del todo, no me desagradan, me conmueven pero hay algo que no les creo, de ahí en más considero que es una historia entretenida con un fuerte compromiso social.