Si alguna vez en el pasado me hubieran dicho que un día en el futuro acabaría entrevistando a una leyenda del rock nacional, no me lo hubiera creído. La primera vez que me escuche hablar de la existencia de La Revolución de Emiliano Zapata fue a los 14 años, justo cuando también comenzaba a interesarme por el rock en general, un martes a mediodía mientras scrolleaba en Facebook me apareció un afiche de la semana de la juventud en Guadalajara, dónde participarían los miembros del grupo con una tocada, en ese momento no le di más importancia, para empezar no vivía en Guadalajara todavía y honestamente ni siquiera me tomé la molestia de escucharlos hasta mucho después.
Ya varios años más adelante, cuando oficialmente me decidí a escucharlos acabe confundido, sus canciones no sonaban muy rockeras que digamos, de hecho, varios de esos temas ya los había llegado a escuchar en los campamentos familiares, les gustaban a mis tíos más veteranos y sonaban más parecido a los Bukis, Brindis o Samuray que a una banda de rock (no es queja). Tras ponerme a investigar un poco fue que comprendí que la banda tuvo varias facetas y durante un tiempo dejaron de tocar rock. Me terminé enterando de la existencia de “Nasty Sex” y demás.
En 2019 tuve la oportunidad de leer el libro “Raíces del Rock Tapatío: 1959 – 1972” escrito por el vocalista original Oscar Rojas y pude conocer un poco más sobre la banda. Finalmente, este mismo año (2022) durante la presentación del “Work Ethic” de Ray Coyote en C3 la banda nos dio la sorpresa de que Javis era uno de los músicos invitados que los iba estar acompañando en el escenario, tras finalizar el concierto el guitarro de la Revo me ofreció la oportunidad de hacerle una entrevista.
Javier Martín del Campo, mejor conocido como “Javis” es el guitarrista y líder de “La Revolución de Emiliano Zapata”, banda considerada como “los padres del rock tapatío”; fueron el primer grupo mexicano en tener éxito en el extranjero y han tenido una carrera casi ininterrumpida desde 1969 hasta la actualidad, teniendo que lidiar con múltiples obstáculos como salidas y fallecimientos de miembros, así como haber vivido en carne propia la persecución que sufrió el rock mexicano por parte de “la dictadura tibia” del PRI.
Llegaron a ser certificados con discos de oro por sus temas “Nasty Sex”, “Ciudad Perdida”, “Al Pie de la Montaña” y “Todavía Nada” durante su fase rockera y más tarde por “Cómo Te Extraño”, “Mi Forma de Olvidar” y “Ayúdame A Sentir” en su fase baladera/grupera.
Más allá de la música, La Revo también se ha llegado a involucrar en el cine, ya sea formando parte del soundtrack de películas como “Y Tu Mamá También” (2001) con “Nasty Sex” y “Roma” (2018) con “Ciudad Perdida”, ambas películas del director Alfonso Cuarón; o con un rol protagónico en la película “La Verdadera Vocación de Magdalena” (1972). Aparte Javis tuvo una breve participación en la serie documental de Netflix “Rompan Todo” (2020).
Además de seguir tocando con “la Revo”, Javis cuenta con su propio estudio de grabación llamado “Zapata Studio”. A lo largo de la historia grandes artistas de la escena tapatía y mexicana han pasado por su cabina, siendo los mas recientes Fanko y La Garfield.
La cita se llevó a cabo en dicho estudio que se encuentra en la misma casa del artista, tras un breve saludo y un regaño de parte de Javis por andarlo “ustedeando” comenzó la entrevista.
Como en cada entrevista me gusta comenzar preguntándoles a los artistas un poco sobre su trayectoria, Javis en sus propias palabras nos cuenta:
“La Revo empieza cómo tantos chavos que existen, éramos los cuates de la colonia “Jardines del Bosque”, ahí vivíamos todos y nos juntábamos a “guitarrear”, y poco a poco esas “guitarreadas” se fueron haciendo un poco más “profesionales”, todos andábamos entre los 16-19 años.
Cada quien aprendió música por su cuenta, yo estudié guitarra, por mi hermana, ella empezó con el brete de querer estudiar guitarra cuando yo tenía cómo 10 años y me apunté luego luego junto con ella, mi hermana lo dejó a los tres meses y yo le seguí con el mismo maestro, así fue como comencé en la música, eran clases particulares.
De esas “guitarreadas” con los amigos de la colonia le seguimos hasta que finalmente pudimos rentar equipo y tocamos en una fiesta de una amiga. Más tarde, un 11 de septiembre de 1970 se hizo el primer ensayo, de ahí salió la rola de “Nasty Sex”, ya tenía yo días “creándola” y ese día no sé, pero algo pasó, que el cuarto de ensayos se llenó de magia y salió un ensayo muy provechoso y terminó saliendo “Nasty Sex”.
Hubo un concurso en una radiodifusora llamada Radio Internacional, con el cual buscaban apoyar el talento de las bandas de acá, ahí grabamos La Revo ,La Fachada de Piedra, 39.4 y Los Spiders, las bandas de aquel entonces, ese concurso lo ganamos nosotros y el premio era grabar con una compañía de discos que vino de la Ciudad de México, se llamaba Polydor, grabamos con ellos y a partir de ahí, de ser los chavos de la colonia guitarreando, a los tres meses del concurso ya estábamos de gira por toda la república.
La grabación de Nasty Sex no fue en un estudio de música, si no de locución, ahí el ingeniero microfoneo todo y dijo “Órale, toquen”, hicimos varias tomas de la rola hasta que dijimos “Esta quedó chida”, después de eso nos dicen “Quieren meter alguna otra cosa” “¿Cómo que meter otra cosa?”, no teníamos idea de los doblajes, total que si hicimos un doblaje de unos bongoes que yo metí, que quedaron bastante feos y que al final de cuentas quitamos; para aquel entonces haber hecho doblaje en un estudio de locución fue algo notorio, en primer lugar nosotros no sabíamos que podíamos hacer doblajes, esa grabación, ya al momento de ganar el concurso, la compañía nos llevó al DF y ahí grabamos 10 temas, pero esa grabación del estudio de locución fue la que más me gusto, ha sido una de las versiones que mas me ha gustado.
Dentro del mismo disco, que fuimos a grabar a Estados Unidos, había una rola que se llama “Ciudad Perdida”, la cual fue el segundo sencillo, pero el éxito de la Revo fue tan grueso que de pronto en las listas de popularidad estaba “Nasty Sex” en primer lugar y “Ciudad Perdida” en segundo, ahora los éxitos se miden de otra forma, pero antes salían en revistas, el hit parade, ahí aparecía la Revo en los primeros lugares, fue algo notorio.
A la Revolución le tocó ser el estandarte del rock mexicano por el suceso que hubo en Europa y México, bien chavos, ahí nos la fuimos llevando.”
¿Cuándo “Nasty Sex” le dio la vuelta al mundo se llegaron a imaginar que llegaría a tener tal impacto?
No nunca, la compañía Polydor nos mandó unas medallas de “oro” por la venta en Europa de más de 100 000 copias, nunca fuimos para constatarlo, un día nos dijeron “los vamos a traer a Alemania y no sé qué tanto”, pero nunca nos llevaron; no había internet, pero nos llegaban panfletos del hit parade en Europa y ahí estaba la Revo en primer lugar.
¿Qué reacción tuvo la banda cuando se enteraron de eso?
No pues nos quedamos weyes (risas), si nos asombró mucho, éramos chavos de entre 16 y 19 años, entonces el éxito nos agarró completamente inmaduros. Entre los promotores de la disquera uno nos agarró cómo manager, siendo que legalmente ellos no podían ser managers, me imagino que por políticas de la disquera que creían que el promotor le iba echar más ganas a su representado.
Ese manager nos transó muchas veces, pero como chavos nos valía madre, nosotros lo que queríamos era tocar y divertirnos.
Hoy en día el chilangocentrismo se considera algo que ya se logró superar, pero a ustedes, que les tocó vivir en una época en la que todo giraba alrededor de la Ciudad de México ¿Cómo fue haber tenido que lidiar con eso?
Si fue difícil, porque la compañía de discos nos presionó para que nos fuéramos a vivir al D.F ahí llegamos a un departamento a la Nápoles y ahí estuvimos todos cómo tres meses, pero nunca nos gustó realmente vivir en la Ciudad de México, éramos muy provincianos, éramos cómo “jipitecas” ¿no? (Risas) de “paz y amor”.
Fue tan duro que no aguantaron el vocalista y uno de los guitarristas, se salieron del grupo y se regresaron; ahora lo veo con otra perspectiva: si yo hubiera sido el manager de la Revo en aquel entonces no hubiera dejado que se separara la banda o que algún elemento se saliera, desde luego el manager trato de presionarlos para que no se salieran pero al final de cuentas se salieron y fue un error, no tanto de nosotros como banda, si no del cuate que velaba por los intereses del grupo, al habernos dejado hacer eso, yo si lo considero un error.
Después de eso empezamos a buscar casas alrededor de la ciudad de México, nos empezamos yendo hacia a las afueras, hacía Copilco, luego en una de esas agarramos la carretera a Cuernavaca, hasta que llegamos a Tepoztlán y ahí nos encantó. Tepoztlán es un pueblo mágico, o bueno lo era en aquel entonces, ya ahorita parece un tianguis, entonces nos fuimos a vivir a Morelos, ahí en Tepoztlán, luego nos aburrió el pueblo y nos fuimos a vivir a Cuernavaca ahí duramos cómo hasta el 75.
Creo que es bueno mencionar que aparece el festival de Avándaro, al cual no pudimos ir, la agenda de la Revo estaba llena, nosotros tocábamos en Monterrey el día que se hizo Avándaro y cuando íbamos en nuestro camión hacia el norte veíamos tristemente como toda la raza venía hacia el sur, al festival de Avándaro, total que nos lo perdimos y si nos pesó, pero pues nosotros ya teníamos la agenda llena y no se pudo. Pero el festival a su vez provocó la represión de las autoridades, cuando vieron que la juventud se juntó y que hubo “mota y encueradas” el gobierno se asustó y prohibieron las tocadas de rock.
¿Cómo fue haber vivido durante el periodo de la represión?
Si nos afectó, porque el trabajo bajo bastante, pero cabe mencionar que no solo el gobierno hizo represión, sino el mismo público, la raza estaba bien pesada, una vez fuimos a tocar a Oaxaca en un club de leones, muy bonito, todo lleno de cristales, a la hora que llegamos y entramos vimos que había mucha raza afuera del lugar, en cuanto salimos a tocar a toda la raza le valió madre y rompieron los cristales y se metieron gratis, destrozaron todo el salón, tocamos realmente nada más para ellos (risas), se fue corriendo la voz y los empresarios empezaron a tenerle miedo a organizar conciertos de rock… si nos bajó mucho el trabajo.
Nota: El periodo de la prohibición del rock fue instaurado por el presidente Luis Echeverría, días después del festival de Avándaro y duró hasta 1988 con la llegada de Carlos Salinas a la presidencia, el fin de la prohibición coincidió con el nacimiento del movimiento “Rock en tu Idioma”, promovido por disqueras de España, Argentina y más tarde de México.
Hubo un tiempo dónde se pasaron a tocar baladas, ¿no?
Sí, exactamente, a raíz de eso
¿Y en algún momento se llegaron a arrepentir de eso?
Pues no, lógicamente nuestros fans rockeros nos tacharon de traicioneros, pero creo que no nos arrepentimos, porque a final de cuentas, aunque fueran baladas siempre hicimos las cosas con el corazón, la música para nosotros fue y sigue siendo algo muy interno, algo con lo que tienes que ser muy honesto y aunque fueran baladas también rockeabamos dentro de ellas (risas). A lo mejor nos conceptuaban junto con los Bukis o la onda grupera, pero nuestras baldas eran mucho más finas, y como que no nos hallábamos, porque éramos finos para la onda grupera y éramos odiados por los rockeros y eso sí nos podía. Antes de las baladas empezamos a hacer música más folclórica (folk) y rock fusión, desgraciadamente muchos de esos temas nunca se escucharon. En ese tiempo ya en Cuernavaca el representante que teníamos también representaba a un grupo de baladas que se llama Yndio y nos decía “Miren ellos están trabajando mucho, pónganse a hacer baladas”, en un principio lo mandamos a la goma (risas) “¿Cómo que baladas?” Total, que fue insistiendo e insistiendo hasta que, así como carrilla empezamos a hacer una rola que fue un éxito después, se llamó “Como te extraño”, empezó como una carrilla a una rola de Grupo Yndio y así salió la primera balada y fue un éxito también, luego ya empezamos a grabar más baladas y así duramos como 10 o 15 años.
¿Llegaron a tener roses con los ex-fans rockeros fuera de los escenarios?
No, realmente no, aunque se nos conociera cómo una banda de baladas el rock lo traíamos en la sangre, entonces también tocábamos rock en las presentaciones a parte de las baladas. Fue como en el 77 que nos fuimos de Morelos y nos regresamos a Guadalajara y aquí fue donde se consolido la onda de la balada, metimos un cantante de balada y todo eso. Así duramos muchos años, íbamos mucho a Estados Unidos, nos la pasábamos ocho meses en EUA y lo demás del año acá. Siempre quise tener un estudio y aproveché las giras, allá compré mi consola y me hice de cosas de estudio, a mí me traumaba que los ingenieros le movían y no lograban el sonido que buscaba, siempre fui inquieto en ese sentido y quise armar mi propio estudio, lógicamente no tenía tanto dinero para armar un estudio grandote, pero esta consola me salió en 15 000 dolores de la época, una buena lana pero tampoco podía competir con los estudios grandes, pero bueno, me lo fui armando hasta lograr tenerlo; ahora es mi chavo (Luis Ángel) quien más lo maneja.
¿También tiene alguna banda?
A los cuatro años le regalamos una batería, siempre le gustó mucho la música, pero se fue más hacia la onda de la producción. Luego estuvo tocando con Aurum cuando estaba chavo todavía. Ya pasando el tiempo entró con Sabino; a Sabino también lo conozco desde niño, yo le hice yo creo su primera producción, aquí en mi estudio, empezaba a rapear el cuate, le hicimos una rola con un cantante más y él, que quedó chidísima. Y siempre llevamos relación con la mamá y el papá, siempre fuimos como amigos/familiares, entonces mi hijo estuvo tocando con Sabino un buen rato y ahora también con Ray Coyote, Ray Coyote son como mis “hijos musicales” ¿Sabes? (Risas) también fui de los primeros que les empezó a grabar desde que estaban chavos. Ahora mi hijo está haciendo su primera producción como solista, lo cual está chido, no es rock, no sabría decirte qué estilo de música es, pero está muy chido.
Durante la prohibición, el rock aguanto gracias a los “hoyos fonkies” , ¿Aquí en Guadalajara no llegaron a proliferar?
Nosotros en ese tiempo ya estábamos en Morelos, entonces si nos tocaron todas las tocadas de los hoyos fonkies, era de los pocos lugares en los que se podía trabajar, lo bueno era que este representante se movía muy bien tanto en Estados Unidos y México, entonces con las baladas y eso si nos tenía trabajando en todos lados, pero todavía rockeando los hoyos fonkies fueron como una especie de salvación para todos los rockeros.
Nota: Los “hoyos fonkies” eran bares clandestinos, improvisados en cocheras, sótanos, bodegas, talleres y demás, durante el periodo de la prohibición fueron los únicos lugares dónde sobrevivieron las bandas de rock, si la policía llegaba a dar con uno la cosa no acababa bien.
La Revo siguen activos, ¿Cómo le han hecho para aguantar durante ya casi cinco décadas?
Con mucho aferre y muchas ganas, en mi caso siempre me he dedicado solamente a la música, no sé hacer otra cosa, amo lo que hago. Amor y honestidad por lo que haces, así es como ha subsistido. En cuanto a la tecnología, siempre me gustaron los estudios de grabación, entonces cada que íbamos a Estados Unidos siempre trataba de hacerme con lo último que salía. Aparte también trato de mantenerme a la vanguardia con todo lo que está pasando.
Yo vengo siguiendo a los artistas locales apenas desde 2017 y he notado que son proyectos muy efímeros, la mayoría de los que comencé a seguir en un inicio ya no existen ¿A qué crees que se deba que la mayoría de las bandas tapatías no llegan ni siquiera a los tres años de vida?
Es que es difícil, y no solamente las bandas tapatías, tener una banda es difícil porque son diferentes personalidades, a veces se van armando los egos y uno quiere sobresalir más que otro, todo ese tipo de cosas afectan. Pero también hay bandas como Porter o los mismos Ray Coyote que ya han pasado los tres años y ahí siguen, fuera de GDL también soy fan de Cafetacvba y Caifanes y ya pasaron la cuota de los tres años desde hace mucho.
Volviendo un poco más atrás, sobre los miembros que abandonaron el grupo ¿El primer vocalista que se salió fue Oscar Rojas, cierto?
Oscar Rojas, así es.
Hace unos años leí el libro que publicó ¿Lo llegaste a leer?
Sí claro, de hecho, yo colaboré ahí también.
En su momento Oscar fue el miembro más icónico de la banda, a pesar del poco tiempo que duró, sin embargo, el libro solo cuenta el periodo en el que él formó parte de la banda, ¿Hay detalles importantes que no se mencionen en el libro?
No recuerdo totalmente el libro, pero es lo que te decía en un principio, si yo hubiera sido manager de la Revo en ese entonces yo no hubiera permitido que se hubiera salido, fue un error, más porque él era la imagen del grupo.
¿Fue por quién le pusieron el nombre, no?
No no no, es un dato que anda por ahí que está mal, el nombre salió andando ahí con los cuates de la colonia, de pronto les preguntábamos “¿Cómo creen que se debería llamar el grupo?” Y por ahí uno de ellos dijo “revolución”, y es que todos los grupos de aquel entonces tenían nombres en inglés “The Spiders”, “The Stone Fachade”, “Three Souls In My Mind”, nosotros quisimos romper eso, pero no fue por el bigote de Oscar, sino alguno de los amigos que dijo “revolución” y luego quien sabe cómo salió “Revolución de Emiliano Zapata” y en un principio dijimos “Está demasiado largo, no va pegar” pero yo creo que el nombre del grupo fue básico para el éxito, fue llamativo, sobresalió a pesar de ser muy largo, no comercial. Cuando dijimos “Ok, Revolución de Emiliano Zapata, está padre, si Emiliano Zapata pedía “tierra y libertad”, nosotros lo que pedimos es “terreno y libertad para expresar nuestra música” esa fue la analogía que pensamos. Pero mucha gente dice que fue por el bigote de Oscar, Oscar no tenía bigote cuando empezó el grupo.
Fue hasta después, pero las versiones de la gente de alguna forma también son válidas, alimentan el misticismo de la banda.
Fotograma de la película “La verdadera Vocación de Magdalena”.
¿Hay alguna otra banda de esa época que recuerdes y que no sea tan mencionada?
La Quinta Visión, de Guillermo Dávalos; pero principalmente los Spiders, nosotros éramos fans de Los Spiders, ya tenían cómo 10 años de vida cuando nosotros empezamos, éramos sus fans y ni siquiera los conocíamos, empezamos yendo a sus ensayos a una cuadra de dónde ensayaban y de ahí los oíamos hasta que poco a poco nos fuimos acercando y los hicimos cuates; creo que Los Spiders fue una de las bandas más representativas para la Revo, más por un día que les pedimos ayuda, les dijimos “Oigan podrían tocar gratis en un concierto con nosotros, para sacar dinero para comprar equipo”, ellos jalaron, lo cual todavía sigo agradeciendo, ellos jalaron tocando gratis para nosotros y si nos ayudó para comprar algo de equipo. Otra de las bandas significativas para nosotros fue La Fachada de Piedra, aunque al final de cuentas todos grabamos en el mismo concurso para la radiodifusora, cada uno grabó una rola y ganó la Revo.
Nota: Las bandas que tocaron en ese concurso fueron la Revo, La Quinta Visión, La Fachada de Piedra, Los Spiders, 39.4 y Toncho Pilatos, estas dos últimas no fueron mencionadas por Javis durante la entrevista. Como dato curioso Toncho fue en su momento el único artista de rock sobresaliente que era originario “del otro lado de la calzada”.
¿Se puede decir que fue ahí donde nació el rock tapatío?
(Asiente) Yo creo que sí, de ahí le pusieron a Guadalajara “la capital del rock mexicano”
¿En qué momento se comenzó a perder es mote?
Pues poco a poco con el tiempo, ponle tú que eso duró hasta el 75-76, se fue disolviendo, pero aun así yo sigo viendo que Guadalajara es un semillero de talentos desde siempre, ahora siendo honesto, nosotros andábamos de gira por toda la república y a dónde íbamos alternábamos con las bandas más sobresalientes de cada ciudad y había unos musicazos en todos lados.
Nota: Otro dato curioso es que, así como llamaban a Guadalajara “la capital del rock nacional” en los 70’s, pasó algo similar en los 2000 que los medios independientes la llamaban “la capital de la música electrónica en México” y hoy en día la llaman “la capital del rap mexicano”, este último parece ser que fue Tren Lokote quien la bautizo, lo llega a mencionar en canciones como “Trucha” y “Pandillero Activo”; en cualquiera de los tres casos los hechos respaldan porque se merece ese título.
¿Crees que los artistas locales son influenciados por el lugar de donde vienen?
Yo creo que sí, de alguna forma todas las bandas de nuestra generación influenciaron a las bandas que nos siguieron, hay una anécdota de cuando nosotros ensayábamos:
Ensayábamos en Ciudad del Sol en casa de mis papás, antes a las casas les ponían botellas de vidrio para que la gente no se subiera, y al lado de la casa había un baldío, entonces cuando ensayábamos había unos chavitos que se subían, aunque la barda estuviera alta y arriba de los vidrios ahí se ponían a oírnos ensayar, anda que unos cinco años después me encontré a Fher de Maná y me dijo “¿Sabes quiénes eran los chavitos que se subían?, éramos nosotros”, entre todos los chavitos que se juntaban a oírnos ensayar se encontraban Fher Olvera de Maná, Arturo Ybarra y el Cala de Rostros Ocultos y hasta Guillermo del Toro (este último lo mencionó ya después de que acabo la entrevista). Y de hecho las armónicas que toca Fher en Rayando el Sol, haz de cuenta que son cómo lo que tocaba la Revo en algunas baladas, desde el primer disco hacíamos baladas, solo que en inglés, si oyes algunas rolas en las que tocamos armónica en ese disco y oyes Rayando el Sol te vas a dar cuenta de la influencia.
¿Cómo has visto el cambio de panorama entre cuando empezó la Revo y el panorama actual?
Es otro mundo totalmente diferente, lo que si veo es que la música en Guadalajara en comparación a otras partes es más tranquila, a pesar de ser rock, rock fuerte, si te fijas en Porter su música es fina, Ray Coyote son más pesados, pero no los puedes comparar con El Tri, que es más agresivo, las bandas de la Ciudad de México siempre han sido mucho más agresivas, creo que Guadalajara tiene esa esencia de un rock “más inteligente” que el que se hace en otras partes, por “más inteligente” no me refiero a que uno sea mejor que otro, si no “más técnico”, más “paz y amor”, es mi visión.
Tras la entrevista nos despedimos, con Javis contado que aún sigue optimista por el presente y el futuro y que no tiene intenciones de dejar de tocar “Se sigue en vigencia a pesar de lo duro que ha sido, seguimos luchando y mientras el cuerpo siga aguantando ahí voy a estar. A los chavos que están empezando, primero les digo que amen profundamente lo que hacen y yo creo que esa es la clave para triunfar, porque puedes llegar y tener un éxito como le pasó a la Revo, luego tuvimos otro, pero lo difícil es conservarte.”
(Esta entrevista fue realizada originalmente en octubre 2022 y estaba contemplada para publicarse en 380GDL, sin embargo jamás fue publicada por lo que se busco un medio alternativo y que no se perdiera)
(Todas las fotos, con excepción del frame de Oscar Rojas son de mi autoría)
